A los 15 años todo parece confuso. Crecer, descubrir quién eres y entablar relaciones no es fácil. Por eso, cuando Aristóteles, un joven introvertido y tímido, conoce a Dante, un chico extrovertido y expresivo, siente algo distinto. Juntos comienzan un camino de exploración de su identidad, a través del cual descubren afectos y experimentan emociones que los harán cuestionarse a sí mismos. Esta novela juvenil abarca la construcción de la identidad desde los márgenes, tanto en la sexualidad como en la territorialidad, evidenciando una crítica a los discursos establecidos sobre la adolescencia y las miradas adulto-dominantes. Los afectos están puestos en el centro de la narración, lo que hace que los lectores se sientan identificados, de alguna u otra manera, con las vivencias de los dos jóvenes. Se destaca la cuidada construcción de los personajes, sin caer en estereotipos, y las profundas reflexiones sobre las relaciones filiales a las que invita. Recomendado desde los 15 años.